El emocionante (y bochornoso) adiós de Falcao

Este jueves no fue un día cualquiera para el fútbol sala brasileño y mundial. Tras caer en la final de la Liga Paulista ante el Corinthians, Alessandro Rosa Vieira, más conocido como 'Falcao', puso fin a una brillante carrera, durante la que llegó a ser en varias ocasiones nombrado como mejor jugador del mundo, y que le llevó a ser el primer profesional de este deporte que logró mezclarse con los archiconocidos futbolistas en una gala de la FIFA. Llevaba muchos meses despidiéndose, resistiéndose a abandonar la pista de 40x20, donde se hizo megaestrella del deporte brasileño, y en la que ha protagonizado algunos de los vídeos más compartidos en las redes sociales. Extremadamente habilidoso con la pelota, a Falcao ya no le acompañaba el físico y después de poner fin a su etapa en la selección de su país, rubricó su destacada carrera a nivel de clubes. A la despedida del «crack», llena de emoción y a la que aportó incluso un gol, solo le faltó la victoria de su equipo, el Magnus Futsal de Sorocaba, y que la final no hubiese quedado empañada por varios hechos lamentables. El ultimo gol de Falcao en activo. No fue de tacón pero llevaba sello de crack, lo que siempre fue. (Vídeo vía TV Futsal HD) #ObrigadoFalcao pic.twitter.com/sNi7iULxXo— David Candelas (@CandelasJr) 7 de diciembre de 2018En lo deportivo, el equipo del veterano astro venció en el tiempo reglamentario, forzando un tiempo extra en el gimnasio Wlamir Marques, en São Paulo, al no existir el valor doble de los goles en cancha contraria. Al Corinthians le bastaba con el empate en la prórroga para amarrar el título y lo consiguió. La invasión de la cancha tras la bocina final no permitió que Falcao hablara por última vez como jugador profesional sobre el parqué, pues necesitó retirarse al vestuario escoltado por la policía local. Los hinchas presentes en el pabellón no querían dejar pasar la oportunidad de acercarse al ídolo en su despedida. Lesión del árbitro y esperpento Fue un emocionante final para un partido lleno de pasión y algunos momentos algo extraños, como las discusiones por el color de las equipaciones o el balón empleado, o el lío que se montó con la lesión de uno de los árbitros. Cuando apenas se habían disputado dos minutos de partido, el árbitro Emerson Rorato se lesionó en la rodilla. Sin un sustituto presente en el pabellón y después de que el árbitro de mesa fuese descartado por los equipos como suplente, el partido se detuvo nada menos que durante una hora y quince minutos, a la espera de que un nuevo árbitro hiciese su aparición en la sede de la final. Una imagen lamentable ampliamente comentada en las redes sociales, donde se bromeó incluso con trasladar la final a Madrid o incluso buscar allí un nuevo árbitro, en referencia a lo sucedido con la final de la Copa Libertadores de fútbol.
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